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Lectura para 18 de mayo del 2018

Shabbat Shalom

Bienvenido a nuestro estudio de la Torá de la porción de la Escritura de esta semana, que se llama Bamidbar / En el Desierto.

Bamidbar / En El Desierto

Números 1:1 – 4:20;

Oseas 1:10 – 2:20 [2:1 – 2:22 en la Biblia Hebrea];

Romanos 15:1-7

 YAHUVEH habló a Moshe (Moisés) en el Desierto Sinai [Bamidbar].”

Números 1:1

La semana pasada, terminamos de estudiar el Libro de Levítico con Parasha Bechukotai.

El estudio de la Torá de esta semana comienza el cuarto de los cinco libros de Moisés, Bamidbar, que significa en el desierto o en la naturaleza. Si bien este nombre está tomado de la quinta palabra Hebrea en el versículo uno, refleja uno de los temas de este libro.

 El Conteo del Ejército

Bamidbar se llama “Números” en Inglés porque los primeros cuatro capítulos mencionan censos de Israelitas, el primero de los cuales es el número de hombres que pueden portar armas. Un nombre Hebreo más antiguo para Bamidbar –Sefer Hapikudim / Libro de los recuentos- también refleja este tema de contar.

En el capítulo uno de Bamidbar, los Israelitas todavía están acampados en el Monte Sinaí después de haber recibido la ley, construido el Tabernáculo y haber sido instruidos en la adoración. Ahora, antes de avanzar a la Tierra Prometida, deben estar preparados para las amenazas que les esperan en el viaje.

YAHUVEH ordena a Moisés que haga un censo de todos los hombres Israelitas capaces de portar armas a partir de los veinte años.

“Moshe (Moisés) los contó en el Desierto Sinai, tal como YAHUVEH le había ordenado.” 

Números 1:19

Los resultados del censo revelan que los Israelitas son poderosos en número. Los hombres capaces de luchar se enumeran por tribu, por un total de 603,550 hombres:

  • Rubén: 46.500
  • Simeón: 59,300
  • Gad: 45,650
  • Judá: 74,600
  • Isacar: 54,400
  • Zabulón: 57,400
  • Efraín: 40,500
  • Manasseh: 32.200
  • Benjamin: 35,400
  • Dan: 62,700
  • Asher: 41,500
  • Naphtali: 53,400

El Servicio de Élite de los Levitas

“En aquel día la raíz de Yishai (Isaí),  y El, que se levantará, para regir a los Goyim (Pueblos);  y en El los Goyim (Pueblos) confiarán,  y el lugar donde El descansa será glorioso.”

Isaías 11:10

Los Levitas no se cuentan en el censo, ya que no deben ser reclutados en el ejército.

Los Levitas, que son descendientes de Aarón, son ungidos como sacerdotes y reciben deberes sacerdotales (Éxodo 28: 1, 29: 9).

Aquellos levitas que no descienden de Aarón desempeñan papeles subordinados a los sacerdotes de Aarón como sus siervos. Estos Levitas reemplazan a los hijos primogénitos de Israel que originalmente recibieron esta tarea, pero perdieron ese privilegio debido a su adoración al becerro de oro. Los levitas, sin embargo, permanecieron fieles durante ese tiempo y se ganaron el favor de YAH. (Éxodo 13: 2, 13: 11-13, 32: 25-26; Números 3: 12-13) 

Como siervos de los sacerdotes, los Levitas son puestos a cargo de los muebles y la estructura del Tabernáculo, desmantelando, llevándolos y volviéndolos a montar mientras los Israelitas se movían por el desierto.

Esta es una tarea tan santa que solo los Levitas pueden acercarse al Tabernáculo. Cualquier persona no autorizada que se acerque sería castigada con la muerte. (Números 1: 47-51)

También se requiere que los Levitas instalen sus tiendas alrededor del Tabernáculo (no en un lugar como las otras tribus). Forman una barrera para evitar que los Israelitas se acerquen demasiado al Tabernáculo, lo que provocaría que la ira de ELOHIM caiga sobre el campamento Israelita. (Números 1:53)

Todos los Israelitas deben acampar a una distancia específica de la Tienda de la Reunión, lo suficientemente lejos como para proteger la santidad del Tabernáculo y lo suficientemente cerca para que los Israelitas caminen hacia las reuniones.

“YAHUVEH dijo a Moisés y Aarón: ‘Los hijos de Yisra’el (Israel) acamparán por clanes, cada hombre con su propia bandera y bajo el símbolo de su clan; acamparán alrededor del Tabernáculo del Testimonio pero a la distancia.’”

Números 2:1–2

Según la ubicación divina, las 12 tribus de Israel acampan más allá del círculo de los Levitas en cuatro grupos de tres tribus cada uno:

  • Judá, Isacar y Zabulón al Este
  • Rubén, Simeón y Gad al Sur;
  • Efraín, Manasés y Benjamín al Oeste; y
  • Dan, Asher y Naphtali al Norte.

Debido a que la luz viene del Este, ahí es donde acampan Moisés, Aarón y sus hijos, ya que son grandes, hombres santos responsables de llevar la luz de ELOHIM a la nación.

Cada tribu tiene su propio príncipe o líder (nasi / Números 2: 3) y una bandera o estandarte distintivo (degel / Números 2: 2) con su emblema tribal y color particular. Se cree que los colores corresponden a las piedras preciosas en la coraza del Sumo Sacerdote (Cohen HaGadol).

Estos símbolos se consideran un signo del gran amor de ELOHIM por cada tribu de Israel, como dice en el Cantar de los Cantares: “Su estandarte [degel] sobre mí es el amor” (Números 2: 4).

Incluso mientras viajaban, los Israelitas mantuvieron su formación particular alrededor del Tabernáculo. esa formación permitió que Korah (un Levita) conspirara con Datan, Abiram y On (Rubenitas) se amotinaran contra el liderazgo de Moisés (Números 16: 1).

Como vivían muy cerca en el lado sur del Tabernáculo, aprovecharon la oportunidad para fomentar una rebelión. 

Por supuesto, esta es una ilustración perfecta de la importancia de elegir cuidadosamente a nuestros compañeros. La Biblia nos enseña que la mala compañía corrompe el buen carácter (1 Corintios 15:33).

Porción Profética Haftará: Unidos Bajo Una Autoridad

“Sin embargo, el número de los hijos de Israel será como la arena del mar, que no se puede medir ni contar” (Oseas 1:10 [2: 1 en la Biblia Hebrea]).

Usualmente hay un tema común entre la Parasha y la porción profética de la Haftará correspondiente.

La conexión en el estudio de hoy del Libro de Oseas (Oseas 1: 10-2: 20 [2: 1-2: 22]) es el desierto y la numeración del pueblo de Israel.

Oseas, sin embrago, profetiza que los números de Israel crecerán en numero como la arena del mar.

Oseas profetiza que las dos casas de Judá y Efraín eventualmente serán unificadas en la Era Mesiánica bajo un solo líder, como también fue previsto por Daniel, Isaías, Ezequiel y Zacarías, entre otros profetas y escritores. (Daniel 7: 13-14; Isaías 9: 6-7, 11: 1-16; Ezequiel 37: 15-28; Zacarías 14)

Este Líder es YAHUSHUA Ha Mashiach 

“Entonces los hijos de Yahudáh (Judá) y los hijos de Yisra’el (Israel) serán recogidos juntos; ellos nombrarán por sí mismos un jefe; y ellos saldrán de La Tierra; porque ese será un gran día, [el día] de Yizreel (Jezreel).”

 Oseas 1:11 [2:2], también 3:3–5

Debido a este tema de reunirse en unidad bajo una sola cabeza, esta porción se lee antes de Shavuot, el momento en que, según la tradición, todos los hijos vinieron como un pueblo para recibir la Torá en el Monte Sinaí.

Del mismo modo, en Shavuot (Pentecostés), los discípulos de YAHUSHUA esperaron en unidad de mente, corazón y propósito para la venida de la RUACH HAKODESH.

(Hechos 1:14)

Hay unción y bendición cuando nos reunimos en unidad con aquellos que aman a YAHUVEH, YAHUSHUA, Y RUACH HAKODESH.

“O ves, que bueno y placentero es que los hermanos vivan juntos en armonía. Es como aceite fragante sobre la cabeza que fluye descendiendo sobre la barba, sobre la barba de Aarón, y baja hasta los Tzitziyot (flecos del talit) de sus vestiduras. Es como rocío de Hermon que desciende sobre las montañas de Tziyon (Sión), pues allí YAHUVEH ordenó la bendición de vida eterna.”

Salmos 133

Redención y Matrimonio

En este libro profético, que es el primero de los Doce Profetas, YAH usa el matrimonio de Oseas con una prostituta como una parábola de la vida real para revelar su gran amor por Israel.

Después de que la esposa de Oseas le da hijos, YAH le dice a Oseas que envíe a su esposa e hijos lejos.

Oseas obedece, pero declara su amor por ellos, a pesar de que su mujer se extravía.

A través de esta dispersión de su familia, Oseas llega a comprender el compromiso absoluto de YAH con Israel a pesar de su extravío.

Con esta idea, Oseas reprende a Israel por participar en asuntos de adulterio con deidades paganas y por ser un cónyuge infiel a ELOHIM.

Y sin embargo, justo cuando Oseas retoma a su esposa que hizo de ramera, YAH promete recuperar a su esposa infiel, Israel. Él promete que el pueblo Judío se arrepentirá y se comprometerá con Él para siempre.

“Yo te desposaré conmigo para siempre; sí, Yo te desposaré conmigo en rectitud, en justicia, en misericordia y en tierna compasión; Yo te desposaré conmigo en fidelidad, y tú conocerás a YAHUVEH.” 

Oseas 2: 19-20 [2: 21-22]

Este pasaje final de la Haftará es una maravillosa profecía de redención, que es recitada por hombres Judíos todas las mañanas mientras se ponen los tefilín (filacterias).

Esta envoltura tradicional de las correas de cuero alrededor de los dedos del hombre es similar a la de un novio que coloca el anillo de bodas sobre su novia. Está destinado a ser un símbolo de los esponsales de YAHUVEH e Israel.

Muchos han dicho falsamente que YAHUVEH ha terminado con Su Pueblo Escogido; sin embargo, la profecía bíblica revela claramente que esto nunca será así. De hecho, en estos últimos días, YAHUVEH se está moviendo entre su gente para restaurarlos física y espiritualmente.

“Contemplen, estoy haciendo algo nuevo;  está brotando – ¿No lo puedes ver? Estoy haciendo una carretera en el desierto, ríos en tierra seca.” 

Isaías 43:19

¡Shabbat Shalom de AMIGHTYWIND!